El Diseño de Información es la disciplina que tiene como objetivo central convertir todo tipo de información en accesible y usable para la gente.
El diseñador David Sless nos habla de que, como profesión, es relativamente joven, ubicando su origen en los años 60, pero como actividad es tan antigua como la humanidad, ya que el ser humano como ser social, desde sus orígenes ha tenido la necesidad de comunicarse con sus semejantes, tanto para convivir como para sobrevivir. Y en este proceso de comunicación siempre ha generado un sinfín de información en diferentes códigos y formatos.
Sin embargo, es en la actualidad, debido al gran auge de medios de comunicación como el Internet, que la cantidad de información que tenemos a la mano nos sobrepasa. Hay tal exceso de información que no sabemos por dónde empezar.
La habilidad más importante requerida en la siguiente década y en un futuro, será la de crear información y experiencias para otros, y que éstas sean valiosas, significativas y atractivas. Para lograr esto, es necesario establecer y desarrollar formas de organizar y presentar datos e información. (Nathan Shedroff, 1999)
Aquí es donde entra en juego el diseñador de información, cuya labor es la de convertir simples datos en información útil y accesible para las personas que lo necesitan. Se encarga de analizar, organizar, jerarquizar y proponer las soluciones adecuadas para hacer llegar a la persona indicada la información que necesita, en el lugar y tiempo oportuno, de una manera clara y sencilla.
El diseño de información va muy ligado a la visualización de datos, pero los gráficos y diagramas son solo un par de resultados de estas disciplinas, dentro de los que podemos encontrar:
- Señalización de espacios abiertos (carreteras, calles, parques, etc.).
- Señalización de espacios cerrados (museos, aeropuertos, hospitales, etc.).
- Mapas (de ciudades, de tren, de metro, etc.).
- Instructivos (de medicamentos, de herramientas, de armado, etc.).
- Formularios.
- Reportes y manuales.
- Páginas web.
- etc.
PROCESO DE TRANSFORMACIÓN DE LA INFORMACIÓN
Nathan Shedroff (1999) señala la importancia de la transformación de los datos en información y, además, nos hace ver que este es sólo el principio, ya que cuando se llega a este punto, todavía falta que dicha información se convierta en conocimiento, y este en sabiduría.
En el siguiente diagrama Shedroff presenta este proceso:
Datos
Los datos como tal, son simples cifras, palabras, nombres, fechas, etc. Por sí mismos no tienen ningún valor o utilidad, ya que no se encuentran organizados, jerarquizados, relacionados o presentados, de tal manera que tengan significado para las personas. Los datos no son valiosos para la comunicación, ya que no son un mensaje completo, sino simples partículas sin sentido.
Información
Es el primer nivel adecuado para comunicarse con los usuarios, ya que los simples datos comienzan a cobrar sentido y valor. Para que esto suceda es necesario un proceso de organización, así como de una forma adecuada de presentación para que la información sea comunicada y pase al siguiente nivel.
Conocimiento
Este se gana a través del entendimiento y de la experiencia al relacionarse e interactuar, ya sea con otras personas o con un sistema u objeto. En esta etapa del entendimiento se interpreta y asimila la información presentada, por lo cual, es muy importante que ésta esté adecuadamente organizada y jerarquizada.
Aquí el usuario es totalmente participativo; además, es el último nivel en el cual la labor del diseñador tiene intervención, ya que en el siguiente nivel todo depende del usuario.
Sabiduría
Como Shedroff explica, la sabiduría es la forma más vaga e íntima de entendimiento. Es mucho más abstracta y filosófica que el resto de los niveles y se sabe mucho menos acerca de cómo crearla o afectarla. No se puede compartir, ya que, a diferencia de los niveles anteriores, es completamente personal y solamente se puede llegar a ella de manera individual.
Al revisar este proceso, podemos entender que el primer requisito de un buen diseño de información es que debe ser comprensible. Analizando, organizando y entendiendo datos e información compleja logra transformarlos en información con sentido y de fácil acceso, llegando así a su principal objetivo: soluciones de diseño entendibles, funcionales, usables y con una experiencia de usuario óptima.